Manual del Estudiante de Medicina: El Doctor Amor.

El estudiante de medicina en una guardia no es solo eso, es decir un palurdo que está aprendiendo a hacer procedimientos de enfermería y emparchándolos con aprendizaje clínico. El estudiante de medicina en una guardia también es un dandy prolijo y arregladito cuyo objetivo es enamorar a todas las pacientes femeninas para, por supuesto, mejorar el vínculo médico-paciente y lograr una óptima adhesión al tratamiento.

El Doctor Amor, estudiante arreglado y prolijito con su ambo y guardapolvo deambula por los pasillos de guardia como si de su espalda florecieran rosas que dejan en cada paso una alfombra de pétalos, el Doctor Amor cautiva y seduce a cada paciente que viene, consola y sonrie, guiña ojos en complicidad, y para el Doctor Amor TODAS SUS PACIENTES SON LA NIÑA MÁS BONITA DEL MUNDO.

El estudiante de medicina en una guardia debe ser El Doctor Amor. Debe ser una marea de belleza, ahogar la fealdad edilicia con su carisma, con una mirada profunda, una voz impetuosa y un tacto cariñoso, el estudiante de medica debe ser el Doctor Amor y seducir a cada paciente femenino que se le presenta. El Doctor Amor es un Tsunami de facha, y no puede evitar que su rostro haya sido tallado por las manos de los dioses.



Y por ello el Doctor Amor es recompensado, no solo con la sonrisa y el amor de sus pacientes, sino también por la ciencia que mediante el saturómetro, que indica la frecuencia cardíaca de la paciente femenina con un pitido, observa que a medida que patina en un lago de belleza por los pasillos de su hospital, cuando la chica linda en la camilla, que espera ser atendida lo ve...... el "frecuenciómetro" indica "taquicardia secundaria a la presencia del Doctor Amor".

Así fue como, a la chica linda que esperaba ser atentida por otro clínico, cada vez que yo pasaba por la distancia y me sumergia en su campo visual... Escuchaba una ligera taquicardia mientras la paciente me miraba, para retornar al ritmo normal cuando me iba. Porque claro..


Soy el Doctor Amor.... y enamoro a todas mis pacientes.